domingo, 21 de septiembre de 2025

¡HACED RUIDO, NO PERMITÁIS EL SILENCIO, EL SILENCIO NO ES VERDAD, EL SILENCIO NO CONDUCE A LA PAZ, EL RUIDO SÍ!

Mensaje de la Inmaculada Madre María y Nuestro Señor Jesucristo a Angelica en Vicenza, Italia el 14 de septiembre de 2025

Queridos hijos, María Inmaculada, Madre de todos los pueblos, Madre de Dios, Madre de la Iglesia, Reina de los Ángeles, Auxilio de los Pecadores y Misericordiosa Madre de todos los hijos de la tierra, mirad, hijos, Ella viene a vosotros nuevamente esta tarde para amaros, bendeciros y deciros una vez más: “DIOS AMÓ LA TIERRA INMEDIATAMENTE Y COMO REGALO OS DIO A SU HIJO UNIGÉNITO. ¡PENSAD CUÁN GENEROSO ES! ¿TENDRÉIS ALGUNA VEZ TAL GENEROSIDAD ENTRE VOSOTROS, HERMANOS Y HERMANAS?”

Ved, hijos, Dios el Padre Celestial no tiene otra cosa en mente sino a sus hijos, y sin embargo tendría todas las razones para no ser tan atento, pero vosotros sois Sus hijos, sois Su creación más hermosa, y así ÉL duerme, sufre y me envía como su mensajera, me envía a buscar especialmente a los más pecadores para que no permanezcan atrapados en las cadenas de Satanás.

Hijos míos, pensad si todos escucháis el deseo de Dios Padre, cómo ÉL os gustaría ser. ¿Podéis hacerlo? Como Madre, creo que sí ¡Tenéis la fuerza para hacerlo, la fuerza que Dios os da cada día, pero vosotros, inconscientes de todo, creéis que es obra vuestra!

¿Realmente lo creéis? ¿Creéis que el Cielo no os ayuda?

Ved, si el Cielo no interviniera, especialmente en este tiempo, ¿qué sería de vosotros?

Observaos a vosotros mismos, mirad vuestros corazones, ya no podéis socializar, nada os conmueve más, veis la muerte y pasáis de largo, veis la enfermedad y no os movéis, no hay nada que os toque. Habéis tirado todas las cosas más hermosas que el Padre os ha dado.

¿Qué queda de vosotros? ¿Qué hará vuestra alma? Grita, grita fuerte, grita al Padre para suplir lo que no le dais.

Como vuestra Madre, os digo: “ARREPENTÍOS!”

No penséis que estas son obligaciones que el Cielo os impone, son todas cosas para vuestra buena vida, para vivir en comunidad, para amaros unos a otros. Visitad a un hermano o hermana enfermo, id al hospital si es necesario, no estéis distantes y no creáis que esto solo es bueno para la otra persona, especialmente es bueno para vosotros porque vuestros corazones se vuelven dóciles y suaves.

¡Vamos, volved y escuchad la Palabra de Dios, no os desviéis, aunque parezca difícil, no lo es, solo es para vuestra felicidad!

GLORIA AL PADRE, AL HIJO Y AL ESPÍRITU SANTO

Os doy Mi Santa Bendición y gracias por escucharme.

REZAD, REZAD, REZAD!

JESÚS APARECIÓ Y DIJO

Hermana, soy Jesús quien te habla: TE BENDIGO EN MI TRINIDAD, QUE ES EL PADRE, YO EL HIJO, Y EL ESPÍRITU SANTO! AMÉN.

Descienda cálido, abundante, tembloroso, luminoso y santificador sobre todos los pueblos de la tierra, especialmente en este tiempo, este feroz tiempo en el que gobernantes y belicistas han hecho un pacto con Satanás, se han abierto a él y le han permitido morar en ellos.

Hijos, soy vuestro Señor Jesucristo quien os habla, Aquel que siempre os ha amado y mostrado el camino correcto a seguir!

Esta noche os digo: “HAGAN RUIDO, NO PERMANEZCAN CALLADOS, EL SILENCIO NO ES VERDAD, EL SILENCIO NO LLEVA A LA PAZ, EL RUIDO SÍ!”.

Ved, hijos, que este tiempo es muy cruel, es como estar atado a un hilo. Oren al Espíritu Santo para que ese hilo sea fuerte y nunca se rompa, porque si lo hiciera, entonces conocerían la tercera guerra mundial. No saben de qué hablar, solo hablan de armas, únicamente por sus propios intereses. Recordad que en toda guerra hay muchos ricos y muchos muertos.

Os digo nuevamente: “NO PERMANEZCAN CALLADOS, EL SILENCIO NO ES UN BUEN AMIGO. DIGAN NO A LA GUERRA Y UN GRAN SÍ A LA PAZ!”

¡Cuántas veces os he dicho que son un número diminuto, vosotros sois muchos más y, por lo tanto, vuestra guerra de fe será más fuerte que sus armas!

OS BENDIGO EN EL NOMBRE DE MI TRINIDAD, QUE ES EL PADRE, YO EL HIJO, Y EL ESPÍRITU SANTO! AMÉN.

LA MADONNA ESTABA VESTIDA TODA DE BLANCO, LLEVABA UNA CORONA DE DOCE ESTRELLAS SOBRE SU CABEZA, SOSTENÍA UNA ANTORCHA EN SU MANO DERECHA Y HABÍA MUCHAS PALOMAS BLANCAS BAJO SUS PIES.

JESÚS APARECIÓ CON LAS VESTIDURAS DEL JESÚS MISERICORDIOSO. TAN PRONTO COMO APARECIÓ, NOS HIZO RECITAR EL PADRE NUESTRO. LLEVABA UNA TIARA SOBRE SU CABEZA, SOSTENÍA EL VINCASTRO EN SU MANO DERECHA Y HABÍA LARGAS FILAS DE VAGONES CISTERNA BAJO SUS PIES.

HABÍAN ÁNGELES, ARCÁNGELES Y SANTOS PRESENTES.

Fuente: ➥ www.MadonnaDellaRoccia.com